VALENCIA, 27 Ago. 16 / 12:20 pm (ACI).- Nueve reclusas del centro penitenciario de Picassent, junto con sus hijos, han podido disfrutar de unos días de vacaciones en la playa gracias a la ONG católica Fundación Padre Garralda Horizontes Abiertos.
Se trata del sexto año consecutivo que la ONG Fundación Padre Garralda Horizontes Abiertos organiza un campamento de verano para mujeres internas del centro penitenciario de Picaassent (Valencia) y sus hijos, para que los más pequeños puedan disfrutar unos días de vacaciones.
Según informa la agencia Avan, todas las reclusas incluidas en el programa cuentan con el tercer grado de libertad (el más próximo a dejar la cárcel de manera definitiva) e incluso algunas de ellas finalizan su condena en este grado en Centros de Inserción Social.
Además de las nueve mujeres también participan en el campamento un total de 16 niños, de entre 4 meses y 6 años de edad. Según han explicado fuentes de la ONG, algunos de los niños “son hijos de reclusas que no asisten al campamento porque no tienen permitida la salida del centro penitenciario”, pero que sin embargo sí pueden enviar a sus pequeños fuera de la cárcel para esos días de veraneo.
En esta iniciativa “colaboran 24 voluntarios, 15 de ellos jóvenes y 9 adultos, de los que la mayoría repiten la experiencia y algunas de ellas cumplen funciones como madres de los niños que acuden solos”.
El campamento tiene como objetivo que “tanto las madres como los niños puedan convivir estos días en un ambiente más distendido e integrador fuera de la cárcel”, han dicho.
Avan destaca las labores de voluntariado que Horizontes Abiertos en Valencia realiza cada semana durante todo el año en la prisión de Picassent, en diferentes turnos, para ofrecer en el módulo de madres cursos de costura, baile y pulseras, y organizan talleres para los niños.
El objetivo es “dar apoyo a estas mujeres y prepararlas par que, una vez salgan de prisión, puedan reinsertarse en la sociedad”, explican desde la ONG.
Además, los voluntarios realizan, cada quince días, salidas con los niños que viven en la cárcel con sus madres, para “que conozcan la realidad y disfruten en el exterior de actividades lúdicas, como parques, piscinas o la playa, ahora en verano”.
También durante el mes de agosto, algunos de los hijos de las reclusas son acogidos en casas de los voluntarios.
La ONG “Fundación Padre Garralda Horizontes Abiertos”, que atiende desde hace 16 años en el centro penitenciario de Picassent a madres reclusas del módulo de preventivos y a sus niños, fue fundada en Madrid en 1978 por el sacerdote jesuita Jaime Garralda.
En el año 2000 estableció una delegación en Valencia que organiza campamentos estivales desde 2002.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 24 de agosto de 2016
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